Te quiero contar lo que está pasando en Dulce Compañía, porque seguro varias ya se están oliendo cambios.
Este último tiempo ha sido bien complicado para nosotros a nivel empresa en DC. Atravesamos meses con ventas muy bajas, no tomamos las mejores decisiones afectando al negocio en varios flancos y la incertidumbre del futuro del país potenció todo al máximo. Lo compartía vagamente en los lives de vez en cuando; pero siendo hiper sincera ahora, esto nos trajo a André y a mi, Daniella, muchas frustraciones, noches sin dormir y miedos. Siento que estos son temas tabú para un mundo en el que siempre debemos parecer mega exitosos; así que si con lo escrito alivio a alguien o al menos a mi propia mente, habrá servido 🙂
Si bien la última temporada de Agendas 2024 nos empezó a ir mucho mejor, la vida tiene formas curiosas de hacerte ver las cosas desde otra perspectiva y de cierta manera ahora agradezco todo lo vivido, porque sin eso creo que, al menos yo, no habría imaginado tomar decisiones tan importantes y decisivas como la de ahora:
Pronto Dulce Compañía no seguirá operando (al menos no como lo conocemos normalmente).
DC ha sido un sueño cumplido. Comenzó con un sencillo deseo mío por diseñar papelería bonita con buena onda y creció de una manera hermosa convirtiéndose en una fuente de inspiración y ayuda para muchísimas personas a través de la organización creativa y la motivación de la #DulceFamilia de querer vivir más bonito.
Fue compartido con André (mi enamorado en esa época y ahora esposo y padre de 2 hijos maravillosos) y le dimos un 1000% de nuestras vidas por más de 7 años porque a ambos nos encantaba la idea de aventurarnos a crear nuestro propio camino, de hacer las cosas un poco diferente, explorar, probar, equivocarnos y seguir adelante juntos.
Hoy nos hemos dado cuenta que es hora de tomar nuevos rumbos y hacer eso mismo que nos encantaba pero ahora junto a nuestra familia en una aventura fuera del país. Hace poco leí la frase «cuantas cosas perdemos por miedo a perder»; y sí, estamos dejando lo conocido, lo que funciona, lo que nos definía, lo que nos hacía sentir «importantes», por lo desconocido. No lo voy a negar, la «hoja en blanco» da miedito pero, como me aconsejó una de ustedes respondiendo a la cartaDC donde les conté esto mismo hace unas semanas, es un miedo bonito 🙂
Dulce Compañía no seguirá operando. Si me preguntas ahorita qué pasará exactamente, ni yo te lo puedo contestar aún porque no lo sé. Estamos abiertos a cómo se desenvolverá todo y solamente el futuro lo dirá.
Por mientras, te cuento que ya tuvimos una liquidación total por cierre de tienda en el Jockey, y a partir de ahora la hemos migrado a nuestra web y tienda de Lince. Así que yo te diría que aproveches (que uses tus cupones por redimir jeje) y te lleves apenas puedas todas esas cositas que te ayudarán a seguir viviendo bonito.
Gracias por leerme :),
Dani
